Mini Switcher le da un vuelco a tu cerebro tanto como lo hace con la gravedad. Eres una pequeña gota en una cuerda floja entre el techo y el suelo, saltando a través de 30 niveles compactos que se sienten como pequeños dioramas de juguete. Toca para invertir la gravedad, atraviesa los huecos, calcula el tiempo. Un solo giro limpio y te deslizas; un giro codicioso y, plaf. Los enemigos y las trampas vienen en varios sabores: robots reboteadores que te sacan de la línea, errantes que patrullan a su propio ritmo, peligros espinosos que castigan a los apresurados. Cada uno se comporta de manera diferente, así que tu ruta no solo es rápida, es inteligente. Su apariencia retro es limpia y amigable, con un ritmo pausado. Sin moliendas, sin relleno, solo habitáculos del tamaño justo que encajan cuando los clavas. ¿Quieres presión? El modo contrarreloj convierte cada decisión en un cronómetro. Reduce segundos, traza líneas perfectas, luego ajústalas más. No parpadees. Es un viaje corto y relajante cuando lo juegas de manera casual, y un pequeño desafío de tiempo cuando te concentras. El movimiento es preciso, las reiniciaciones son instantáneas, y la maestría se siente ganada, no regalada. Presiona Play y cambia el mundo.