Diferencias del Impostor te sumerge en una tensa caza entre compañeros de tripulación e impostores, donde cada píxel cuenta. Sin florituras. Solo ojos agudos, clics rápidos y esa dulce sensación de victoria cuando finalmente surge la última diferencia. Diez niveles te esperan. Cada escena esconde cambios diminutos y apenas visibles: manchas, cables movedizos, una sombra que no debería estar allí. Te inclinarás, entrecerrarás los ojos, soltarás alguna que otra maldición y luego sonreirás cuando lo pilles. Encuentra una diferencia y queda marcada, asegurada y fuera de tu mente, para que puedas seguir adelante sin dudar. No aporrees el ratón. Fallas tres veces y boom, juego terminado. Precisión sobre pánico. Calma sobre caos. El juego recompensa el enfoque y castiga los clics al azar, y por eso precisamente es tan satisfactorio. He perseguido estos detalles engañosos yo mismo, sudando el reloj y disfrutando cada casi-acierto. Si tus ojos son tan agudos como dices, este es tu terreno. Dale al Play y demuestra tu visión.