Flex Run convierte tu sala de estar en una pista de obstáculos en movimiento. Guía a un ágil gimnasta a través de pasillos donde los sofás se deslizan, los armarios se balancean y las mesas barren el suelo. Los muebles se mueven de un lado a otro, y tú te deslizas a través de ellos haciendo poses limpias y artísticas: giros, arcos, puentes, y splits. Pierde el ritmo y ¡pum!; clava la pose y fluye. Cada esquive llena tus bolsillos de monedas. Gástalas en jerseys relucientes y coloridos para que tu campeón destaque en la pista. Etapas cortas, reinicios rápidos, vibraciones brillantes: perfecto para después de un largo día. Sigue practicando, nivel tras nivel, hasta que tus reflejos se sientan olímpicos. Fácil de aprender, difícil de dominar. El ritmo te engancha, el movimiento se siente ágil, y cada nueva habitación ofrece un patrón fresco para interpretar. Ríe cuando un armario volador casi te golpea; sonríe cuando atraviesas el hueco como una cinta. ¡Dale a jugar y flexiona tu camino hasta el podio!